jueves, 15 de junio de 2017

PEPA ROMA, periodista, viajera, escritora española y su última novela.

Me resulta casi fácil y agradable abordar la nueva historia que Pepa Roma nos presenta en forma de novela: “Una familia imperfecta”. Esto se debe a que la protagonista (Cándida) es, más o menos, de mi edad y en muchos aspectos nos parecemos: 
Tiene una madre absorbente, autoritaria, un padre apocado y buen mozo, un hermano menor apegado a la madre, una tía que la ama y protege. No siente que pertenezca a ningún lado. Ambas llegamos como hijas de mujeres casi emancipadas y digo casi porque, si bien eran emprendedoras, negociantes entusiastas, etc., aun necesitaban de un hombre a su lado para sentirse respetadas y seguras.

Además, la descripción de Barcelona, la historia sobre la guerra previa a Franco y lo vivido después, han cambiado mi concepción de esa ciudad casi por completo. No veré (por ejemplo) a Las Ramblas como un lugar turístico y “for export only” nunca más y, como este, muchos lugares barceloneses han tomado un tinte y un cariz diferente gracias a la pluma de Pepa Roma.

Porque la historia en sí es una vía para retrotraerse a un tiempo de juventud, de revolución, de infancia y adolescencia que no volverán, por suerte, en la mayoría de las veces. Retrotraerse incluso a las vidas de sus antepasados. 
   
                                                 
Es un desempolvarse de enconos, falsedades, traiciones, enredos… toda esa trama que cada familia guarda disfrazándola de reliquias ancestrales. Es ese ajuste de cuentas con lo que somos y no fuimos, con lo que dejamos de hacer… con la vida que se acerca a un final indecoroso… Es un aprendizaje.

   También es descubrir ese secreto que cambió su personalidad, su relación consigo misma y con los demás. Develar esa verdad que la liberará después de tantos años, tantas pesadillas, huidas, rencores, tanta vida y tanta muerte…

Ella no es aquella “mujer rota” de la que dijera Simone Beauvoir: “La mujer rota es la víctima estupefacta de la vida que ella misma se eligió: una dependencia conyugal que la deja despojada de todo y de su ser mismo cuando el amor le es rehusado”. Cándida es una mujer golpeada, pero su dolor y fortaleza la enaltece, se levanta como una heroína rebelde en su propia revolución espiritual.

Cándida también denuncia, nos muestra cómo la guerra, la política, la revolución… siempre sirve a intereses de unos pocos. Denuncia la mala atención que ofrece el sistema médico en la actualidad, la confusión que brinda la globalización para la gente en general y los de tercera edad en particular. Cándida nos sorprende con la fuerza de su testimonio.

Cuando ya podríamos creer que termina la historia de esta mujer que va perdiendo a sus seres mas cercanos, que descubre los entretelones de su propio drama mientras se despoja de creencias y dudas… cuando entendemos que todo acaba… nos equivocamos. La historia de Cándida recién se inicia.

Es una novela tan bien estructurada que hace que una vuele sobre sus capítulos y sus casi cuatrocientas páginas, en cada una hay claves, lecciones, secretos, acusaciones, suspenso, confidencias… todo lo que da a una historia su grandeza, más allá de la acción, del sexo, los conflictos…

Termina de convencerme que Pepa Roma es una escritora excelsa, su manejo de lenguaje sobrio y colorido a la vez.

Agradezco enormemente la confianza de Pepa Roma por entregarme su libro para reseñarlo. Lo he disfrutado.

Párrafo de la novela:
“Paseando por la ciudad que me vio crecer, me siento una turista en mi propia vida. Pero cuando estoy en Madrid, digo que soy de Barcelona. Allí donde he ido con mi marido, Londres, París o Roma, he dicho que soy de Barcelona. Ahora siento que nunca he estado aquí menos paso de lo que he estado en Madrid, lo que hoy me hace sentir de lo más extraña en un debate político, sobre la independencia, como si ya no fuera del todo catalana. Pero como tampoco me siento de ningún otro lugar por fuerza, he de concluir que es conmigo con quien algo va mal. Algo que no encuentra acomodo en ninguna parte.
Al llegar a la calle Tuset, recuerdo con nostalgia el primer sabor a una cierta libertad, una libertad todavía limitada, cuando al salir del colegio de monjas dejaba el uniforme en casa de una amiga y os veríamos con nuestra primera minifalda para venir a La Cova del Drac. Ahí sí tendría ya catorce o quince, tal vez dieciséis, cuando un beso deja de ser un juego de niños para convertirse en exploración del deseo. Pero no para mí.”


Biografía de Pepa Roma:
Nacida en La Sentiu, Lleida, España. A los siete años se trasladó a Barcelona con su familia, donde estudiaría Ciencias de la Información y Filosofía y Letras en la Universidad Autónoma de Barcelona.

En 1970-1, vivió un año en Londres para continuar con sus estudios de Lengua y Literatura inglesa, iniciados en el British Institute de Barcelona, culminándolos con el Proficiency in English. Un diploma que se añadía al de la Universidad de Toulouse sobre lengua francesa.

Antes había viajado ya a distintos países europeos con su madre (Italia, Francia, Suiza) y emprendido un viaje sola a los 16 años a París. Fue en los albergues de juventud de París y poco después en el Londres de los hippies donde descubriría las posibilidades de viajar con muy poco dinero y las rutas seguidas por los viajeros de la época. Tras su regreso a Barcelona y al terminar COU, en agosto de 1972 salía de casa con dirección a la India decidida a dar la vuelta al mundo.

Gracias a ello, a los 22 años, había ya vivido un año en Londres, un año en Australia, tres meses en California, seis en la India, y culminado su proyectada vuelta al mundo.

En Australia, hizo un curso de fotografía en la Universidad de Sydney. Tras comprarse su primera Nikon en Singapur, proseguía viaje por el Extremo Oriente y el Pacífico; y hacía sus primeros reportajes sobre Indonesia, Taiwan, Corea, que serían publicados a su regreso a España en revistas como Jano, Algo o La Gaceta Ilustrada -en la que publicó las primeras imágenes y reportaje sobre Bali que se veía en España.
Así pues, estaba haciendo ya de periodista antes de saber que iba a estudiar periodismo.
Tras su regreso a Barcelona en 1974 para matricularse en la universidad, seguiría realizando numerosos viajes, entre ellos uno a África de seis meses -en una travesía con otros dos amigos que les llevó a cruzar el Sahara argelino en una camioneta y recorrer Mali, Alto Volta, Ghana, Costa de Marfil, Senegal.
Fue al regreso de África a fines de 1976 cuando retomó sus estudios en la Universidad y se integró en el equipo de TeleXpres -periódico mítico de la transición barcelonesa, donde había estado previamente en calidad de estudiante en prácticas, además de en La Vanguardia.
Al cerrar TeleXpres, a principios de los años 80, y ya con el título universitario de periodista, volvió a colgarse la mochila a la espalda para recorrer Turquía -donde se quedó otros tres meses- y diversos países del mundo árabe, entre ellos Túnez, Libia, Marruecos, Irak, Egipto, Jordania, etc. para trabajar en ellos como periodista por cuenta propia o free-lance. De ese periplo volvió con entrevistas a personajes como el primer ministro tunecino Nuira y el hijo del presidente Burguiba, así como numerosos reportajes que fueron publicados en diversos medios, entre ellos, Diario16 y La Vanguardia.

De regreso, en 1981, se integraba de nuevo en la redacción de un periódico, esta vez de “El Periódico de Catalunya”.
En 1983, dejaba Barcelona para ir a trabajar en TVE en Madrid -Telediarios e Informe Semanal-. Desde entonces, ha trabajado también en otros de los principales medios de comunicación españoles, como Diario16, El Globo, El País, una tertulia de Catalunya Radio, etc.
Aunque ha cubierto áreas tan diferentes como política española, cultura, o entrevistas para las páginas del domingo, la relación con diferentes culturas y continentes continuaría a lo largo de su carrera periodística como enviada especial a diversos escenarios para cubrir acontecimientos de actualidad mundial. Entre ellos conflictos como la guerra Irán-Irak o la revuelta marroquí de Fez en 1990; elecciones, referéndums y procesos de transición democrática en India, Filipinas, Corea del Sur, Sudáfrica, Chile, Argentina, Países Bálticos, Guatemala, Argelia, etc.; fenómenos sociales como la revolución conservadora de Reagan en EE.UU.; el auge del islamismo en países como Marruecos, etc.

En calidad de entrevistadora para las páginas del domingo o contracubiertas de diferentes periódicos, además de personajes de diferentes campos de la cultura, la ciencia o la política española, destacan las realizadas a mandatarios internacionales como Nelson Mandela, Carlos Menem, Fidel Ramos, V.P.Singh, o tan determinantes en la política internacional como Michel Camdessus, el ex director general del FMI, o Mike Moore, director general de la Organización Mundial de Comercio.

Su experiencia en periodismo le ha llevado asimismo a trabajar como Directora de Comunicación en el Ministerio de Medio Ambiente (primer gobierno de Zapatero, 2004-8) y, anteriormente, como Directora de Comunicación del Ministerio de Justicia (1993-96, último gobierno de Felipe González), Así como en la Exposición Universal de Sevilla 1992, como subdirectora de Tele-Expo, la compañía formada por Televisión Española y Canal Sur para la difusión televisiva de Expo’92.

Su primera incursión en la literatura fue con un relato breve “Adios Estambul”, accesit del XIII Premio Antonio Machado (1989), al que siguió en 1990 la novela corta “Como desaparecer sin ser visto” (Exadra).

En 1997 obtenía el Premio Andalucía de Novela con “Mandala”, novela publicada ese mismo año por Alfaguara. En 2011 ganaba el Premio Azorín de Novela con “Indian Express”, publicado por Planeta. Su última novela ‘Una familia imperfecta’ ha sido publicada en abril de 2017 por la Editorial Espasa.

Entre sus libros figuran también otros de ensayo, como “Jaque a la Globalización. Cómo crean su red los nuevos movimientos sociales y alternativos” (Grijalbo 2001), en el que se reúne mucho material periodístico de primera mano recogido en diferentes partes del mundo; “De profesión, periodista. El diario como escuela taller” (Anaya, 2000); “La trastienda del escritor. Una vocación y un oficio” (Espasa Hoy, 2003); “Hablan Ellos” (Plaza & Janés, 1998). Ha sido también editora y coordinadora del libro “Ser Hombre” (Temas de Hoy, 2001), así como de la colección Modelos de Mujer de Plaza & Janés.

Presentación de su libro y Sinopsis:

En PÚBLICO:

Pepa Roma presenta en Madrid su cuarta novela, 'Una familia imperfecta'
La periodista, que ha ahondado en las relaciones de poder existentes en un clan catalán, estará acompañada por Juan Cruz.
MADRID 15/05/2017 23:28 Actualizado: 15/05/2017 23:31 EFE

La periodista Pepa Roma presentará este martes en Madrid su cuarta novela, Una familia imperfecta, donde retrata y ahonda en las relaciones de poder existentes en un clan catalán. El acto tendrá lugar a las 19 horas en la Librería Alberti (calle Tutor, 57) y contará con la presencia de Juan Cruz.

Roma, quien ha dado la vuelta al mundo y entrevistado a grandes mandatarios internacionales como Nelson Mandela, explicaba en una entrevista que también ha querido desmitificar la figura de la madre, "algo que todavía hoy es tabú" y rendir un homenaje al espíritu catalán "emprendedor y con talento".

Con tintes autobiográficos, en Una familia imperfecta narra la peripecia vital de Cándida, hija mayor de una familia acomodada venida a menos. La mujer reside habitualmente en Madrid y debe volver a su Barcelona natal para acompañar a su madre, una mujer despótica y resentida, en los últimos meses de su vida.

También muestra el día a día del hermano de Cándida, Ángel, un hombre enfermo de cáncer, y de la tía Rita, una mujer ya anciana, emancipada en su momento, que no soporta a su cuñada y madre de la protagonista.

La autora leridana, residente en Madrid, ha comentado que todo empezó a tomar forma al ver "cómo se desmorona una familia", con unos progenitores ya mayores, de los que una hija debe ocuparse y que, a la vez, son "los últimos testimonios vivos de una época, lo que tiene un valor extraordinario".


MUJER de HOY, entrevista.
Hablamos con la escritora que vuelve con su última novela: Una familia imperfecta.

Tras dedicar sus dos últimas novelas a su adorada India, esta viajera irredenta y colaboradora de Mujerhoy vuelve a casa con Una familia imperfecta (Espasa), la historia de una mujer que lo pierde todo excepto su historia, ambientada en los escenarios juveniles de la escritora: la Lleida rural y Barcelona.

Mujerhoy: Hacía mucho que no escribía novela, desde Indian Express, en 2011. ¿Por qué tanto?
Pepa Roma: Tardo años en darle forma definitiva a una novela. Además, esta se ha cruzado e impuesto mientras escribía otra, con tanta fuerza que tuve que dejarlo todo por ella.

Mujerhoy: También vuelve a los escenarios de su pasado. ¿Por qué?
Pepa Roma: Tras dar muchas vueltas por el mundo, esta novela es literalmente un regreso a casa. Supongo que responde a la necesidad de indagar en las propias raíces e identidad. Esas sagas familiares que te cuentan los padres, que antes no había querido escuchar, han adquirido una importancia extraordinaria para mí a medida que han ido desapareciendo los testimonios vivos de la historia. Esto me ha hecho sentir la depositaria de esta memoria. Por otra parte, el doloroso secreto de infancia de Cándida, la protagonista, trata de reflejar la necesidad que tenemos todos de enfrentarnos a aquello de lo que huímos si queremos llegar a ser libres.
“Para ser libres, todos tenemos que enfrentarnos a aquello de lo que huimos"
PEPA ROMA
Escritora
ENTREVISTA a PEPA ROMA en MUJER de HOY


Mujerhoy: ¿Cuánto de esta novela es inspirado por sus propias vivencias?
Pepa Roma: Para mí, una novela surge a partir de la necesidad de desentrañar una situación o un dilema vital. Para que resulte intensa y auténtica tienes que hablar de lo que conoces y eres capaz de interiorizar. Pero ello no significa que lo que le pasa a Cándida me haya sucedido a mí. Sí trato de ser fiel, en cambio, a la memoria de nuestra historia colectiva.

Mujerhoy: Una familia imperfecta relata un momento vital triste: aquel en el que los hijos se convierten en cuidadores de sus padres.
Pepa Roma: Sí, y precisamente para mí, que desde joven me dediqué a viajar e hice de la libertad bandera, ha sido un shock descubrir que hay responsabilidades que en un momento se imponen sobre tu propia vida. Sucede cuando llega el momento de cuidar y despedir a los padres. Y las mujeres seguimos siendo las cuidadoras, lo que hace de nosotras acompañantes hasta el final y sacerdotisas de la buena muerte.

Mujerhoy: Curiosamente, ese derrumbe familiar sirve a la protagonista para resolver el misterio de su niñez. ¿Hay que desprenderse de todo para encontrar lo esencial?
Pepa Roma: Sí, me doy cuenta de que todas mis novelas buscan lo mismo: llegar a lo esencial de lo que eres y de lo que importa en la vida. Son un viaje íntimo o de iniciación a la vida.

Mujerhoy: Otro tema central es la relación madre-hija. ¿Por qué?
Pepa Roma: En las hijas, toda la forma de ser está marcada por su mandato. Las madres terribles, como la de la novela, son más frecuentes de lo que yo creía. La furia de ciertas mujeres puede llegar a ser terrible. Pasa que cuestionar la figura de la madre es tabú: el mito nos las presenta como intrínsecamente nutricias y bondadosas. Pero las madres modelo no existen.

Mujerhoy: Una historia que habla tanto del carácter catalán, ¿cómo cree que será recibida por sus familiares y amigos de allí?
Pepa Roma: La reacción de tu gente, de tu pueblo, siempre es la que más te importa. El miedo es muy grande. Por ello es tan difícil escribir sobre ello y lo pospones hasta que, como escritor, te sientes obligado a hacerlo.

RESEÑA, diario EL PAIS:
La periodista y escritora Pepa Roma, en la presentación de su nuevo libro, 'Una familia perfecta', en Madrid. CARLOS ROSILLO

Anda estos días Pepa Roma surfeando la cresta de una ola que parece eterna pero que, como todas, romperá y se hará añicos algún día. Una ola de dolor y de calor y de agradecimiento que la tiene en carne viva. Se debate en la montaña rusa de emociones de haber recién enterrado a su marido y maestro, el periodista Miguel Ángel Bastenier, y de haber presentado, esta noche de martes su propia y nueva criatura literaria. Una crónica de los secretos y mentiras que habitan tras las puertas de las casas. Un retrato de tres generaciones de una familia que no tiene por qué ser la suya, pero que pudiera ser la de cualquiera. Una crónica de las pérdidas y los duelos que, ley de vida, nos esperan implacables en los recodos del camino y que a ella misma, “eterna adolescente viajera” hasta casi los 60, la han puesto de golpe, como nos pondrán a todos, en su sitio.

Todo el mundo cree que todas las familias son felices menos la suya. Ese es el origen del título Una familia imperfecta (Espasa) -esa redundancia- de la nueva novela de la escritora y periodista Pepa Roma, nacida y criada Sant Gervasi, el barrio bien de la burguesía de Barcelona que, tras sus elegantes fachadas, esconde, como todos, lo mejor y lo peor de la condición humana. Cándida, la hija pródiga y exitosa afincada en Madrid, vuelve a casa a ocuparse de su madre y de su hermano enfermos y se encuentra con una familia y una ciudad que ya no es la que era. O sí, pero que en la decadencia y el impudor y la intimidad extrema de la enfermedad y la muerte enseñan su verdadera cara.



Pertenece Pepa Roma a una generación de mujeres que fueron a la vez alentadas y reprobadas por sus madres. Recibieron de ellas, que apenas lo estrenaron en la República para después sufrir su amputación por la dictadura, el mandato de ser libres, pero sin olvidar que en su casa, penando, había una mártir que no pudo. “Muchas de nosotras, para crecer, tuvimos, además de los hombres, que independizarnos de nuestras madres”. Así explica Roma el “ajuste de cuentas” con su pasado que supone su novela, a la vez que define la orfandad como la verdadera frontera entre la adolescencia y la edad adulta. Esa que estrenará, supone, cuando la ola en la que se halla estos días rompa por fin en espuma y la deje frente a la nueva playa de su vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario